AÑO 2012Los inicios
AÑO 2013El gusto por el cine clásico
AÑO 2014La consolidación del cine clásico y de Holywood
AÑO 2015La apertura a nuevas variantes. El Cine Negro
AÑO 2016El año del cambio
AÑO 2017La introducción de cine europeo
AÑO 2018El salto hacia delante
AÑO 2019La globalización de la programación
AÑO 2020El año de la pandemia.
AÑO 2021El año en que todo comenzó a ser diferente.

2012. Año primero. Los inicios.

El 29 de enero de 2012, comenzaron las actividades del Cine Club, con la proyección de la maravillosa película Con Faldas y a lo loco, de Billy Wilder y con Marilyn Monroe, Jack Lemmon y Tony Curtis en los principales papeles, una de las mejores películas de la historia del cine y una comedia excepcional.
La proyección de la misma se realizó en el Edificio Administrativo de Mataelpino, con una asistencia de 6 personas. La película se proyectó doblada al castellano y según algunos de los asistentes fue del agrado de todos. El coloquio, moderado por Jesús Yagüe fue breve y la mayor parte del tiempo consistió en explicaciones de Jesús, sobre diversos aspectos de la película.
En este primer año, en el que las sesiones se reducían a una cada mes, con la interrupción de los meses de julio y agosto, Jesús Yagüe hace una selección de películas, en su gran mayoría producidas antes de 1950 y casi todas en Estados Unidos, considerado por todos, la Meca del cine, con una aparición del Reino Unido, Italia y Alemania que aportan directores consagrados en esos tiempos.
Los géneros a los que pertenecen las películas que se proyectaron, fueron diversos, pero sobresalieron los de Cine Negro, intriga y drama incluidos, la Comedia, romántica y negra, el drama romántico y el espionaje.
Los directores que se seleccionaron en esta primera etapa eran de reconocido prestigio, entre otros, Joseph Mankiewich, Alfred Hithcock, Ernest Lubich y Otto Preminger.
Esta selección, tiene mucho de los gustos personales de Jesús, un enamorado del cine americano, de los clásicos más puros y del cine de la época por la que él se sentía influido.
Hay que tener en cuenta que Jesús Yagüe se incorpora a la industria del Cine a finales de los años 50 y por lo tanto, en esos primeros años, sus referentes son los grandes directores de Holywood, algunos de ellos alemanes nacionalizados americanos y que como consecuencia de la subida al poder de Hitler, el estallido de la Segunda Guerra Mundial y sus circunstancias personales, decidieron trasladarse a Estados Unidos, a la ya floreciente meca del cine.
La mayoría de las películas seleccionadas por Jesús para ese primer año están producidas y estrenadas en los años 40, durante o al final de la segunda guerra mundial y cuando el cine sonoro ya se había consolidado como referente en la industria cinematográfica.
No olvidemos que el cine sonoro empezó a consolidarse a partir de 1935 aunque ya existía desde 1927 cuando se estrenó la que se considera primera película sonora El Cantor de Jazz, producida por Warner Bross en un novedoso sistema de reproducción sonora llamado Vitaphone.
Aunque nadie de la época consideró que el Cine Mudo iba a desaparecer, en muy pocos años desapareció por completo, probablemente como consecuencia de una decisión de supervivencia que tomaron las grandes productoras cinematográficas americanas una vez que se produjo el desplome de la Bolsa de Nueva York en 1929 y que consistió en la unificación de los distintos sistemas de reproducción sonora que existían y que facilitó la producción de películas sonoras de una manera más rápida en detrimento de
las películas mudas.
En definitiva, para este primer año, se eligieron, películas que habían sido distribuidas en España, en los años 40, 50 y 60, que tuvieron gran éxito en su día, con actores muy conocidos y con una calidad cinematográfica muy alta y que podían ser del agrado de una mayoría de personas que, no necesariamente, tenían que tener unos conocimientos cinematográficos elevados.

2013. Año segundo. El gusto por el cine clásico.

El año 2013 en el que se continúa con la proyección de una película cada mes, excepto los dos meses de verano, es una continuación, en cuanto a programación se refiere, del año anterior. Continúan proyectándose películas de cine clásico, de los años 40 y 50 del pasado siglo, dirigidas por grandes directores, John Ford, Charles Laugton, Howard Hawks, Max Ophuls, prácticamente todas producidas y rodadas en Estados Unidos, excepto una película francesa de Jacques Becker. Todas ellas han sido interpretadas por actores de reconocido prestigio, muy conocidos por el gran público en la época en la que se estrenaron en España y que como todos sabemos, estaba caracterizada por una férrea censura, que hacía que los doblajes no fueran del todo fidedignos, en aquellos casos en los que consideraba que los diálogos y las expresiones podían atentar contra la moral y/o las buenas costumbres. Algunas de ellas fueron estrenadas en España, muchos años después de su rodaje y estreno en otros países.
Una de las razones por las que se casi todas las películas eran de producción americana, es puramente tecnológica. El paso del cine mudo al sonoro supuso una renovación tecnológica de primera magnitud que requería, no solo de los conocimientos técnicos para hacer coincidir la imagen con el sonido, sino de grandes medios materiales para adquirir los equipos de filmación y producción necesarios para poner a disposición del público las películas. El resto de los países, al no tener la mencionada tecnología, no podían producir películas por lo que en la década de los años 30 el cine americano, casi se hizo monopolístico.
Si a estos factores les unimos el periodo en que esta transformación tecnológica se produjo, con convulsiones sociales en toda Europa que devinieron en el comienzo de la Segunda Guerra mundial cuyo campo de batalla nunca afectó a Estados Unidos y que tuvo como consecuencia el inicio de su liderazgo mundial, no solo desde el punto de vista político sino también desde el económico, tenemos otro factor que hizo que la hegemonía del cine americano fuese incontestable.
El género predominante fue el del Cine Negro, con sus intrigas y dramas y se programó una comedia romántica y un western de los clásicos de John Ford.
Desde el mes de noviembre del año anterior, las proyecciones ya se realizaban en la Casa de la Cultura de Cerceda, que reunía unas mejores condiciones que el Edificio Administrativo de Matalpino, ya que tenían proyector, altavoces y pantalla grande.
Todas las películas se proyectaron dobladas al castellano, la media de asistentes oscilaba entre seis y diez personas que en su mayoría eran habituales a las sesiones y que participaban de manera activa en los coloquios que se generaban al finalizar la proyección de la película.

2014. Año tercero. La consolidación del cine clásico y de Holywood.

El año 2014 continúa siendo un año en el que la gran mayoría de las diez películas que se proyectan pertenecen a lo que podemos denominar Cine Clásico, con películas producidas en las décadas de los 40 y 50, aunque se empiezan a introducir películas de los 80 y 90.
La definición de Cine Clásico empieza a acuñarse entre los estudiosos de la industria cinematográfica en los años 60 y se refiere al cine producido en Estados Unidos desde la primera época, 1915, hasta finales de la década de los 50, que llevaron a la industria cinematográfica estadounidense a ser la referencia mundial para este sector económico y que se caracterizó por mantener una serie de convenciones y rasgos visuales, sonoros, ideológicos de aquella época. Como dicen los teóricos del mismo, el cine clásico persigue convertir cualquier experiencia o historia humana en un espectáculo narrativo audiovisual.
También hay que considerar que, especialmente desde la aparición del sonoro, el cine introduce una serie de aspectos en los que la imagen ya no es lo prioritario, sino que aparecen aspectos como el diálogo y el sonido que reducen la importancia de la imagen en la producción de las películas.
Las claves distintivas del Cine clásico, según los estudiosos del género, suelen ser:
-Un comienzo con un plano general que deviene en un primer plano.
-Escenas al servicio del personaje protagonista y en el que la pauta de la imagen es el realismo.
-Sonido que depende de la imagen y que está a su servicio.
-Narrativa y montaje que se utiliza de modo secuencial y en continuidad para facilitar la comprensión del argumento.
-Desenlace y final en el que una verdad es capaz de dar respuesta a todos los interrogantes y en el que el final es feliz y deja buen sabor de boca a los espectadores. Todas estas características son las que Jesús Yagüe, como presentador y moderador de las sesiones, va explicando de manera sutil, con la intención, como la lluvia fina, que vaya calando sin darnos cuenta, hasta conseguir en los que la reciben un conocimiento sobre la materia.
El país de origen de las películas, en su gran mayoría, sigue siendo Estados Unidos, pero se introduce una película española de Juan Antonio Bardem y otra francesa de Patrice Leconte, ya de épocas posteriores para también ir introduciendo otro tipo de cine en contraposición al, hasta ese momento mayoritario, cine clásico. El resto siguen siendo películas de los grandes directores clásicos de Hollywood, Howard Hawks, Alfred Hitchcok, Max Ophuls, Fritz Lang, Stanley Kubrick, pero también empiezan a aparecer directores con
Ridley Scott y la última época de John Houston.
Las películas se proyectan en su versión doblada y los géneros que siguen predominando son el Drama y el Cine Negro.

2015. Año cuarto. La apertura a nuevas variantes. El Cine Negro.

Este cuarto año, sigue la tendencia de los años anteriores. Se sigue centrando en una revisión de Cine clásico de los años 30, 40 y 50, casi todo producido en Estados Unidos por los grandes directores clásicos de la época, John Houston, Fritz Lang, Orson Welles, Louis Malle, Ernest Lubitsch, Richard Brooks, apoyados por grandes actores y actrices.
A partir de este año, Jesús Yagüe comienza a introducir otro tipo de películas con una temática diferente y que, él pensaba, todo buen amante del cine debía conocer: El Cine Negro.
Este género cinematográfico, toma el término de Cine Negro de una colección de novelas policiacas de la Editorial Gallimard en Francia, pero ya en los años 30 comenzaron a producirse en Estados Unidos películas sobre gansters en la época de la Gran depresión, en los que la realidad cotidiana estaba presente. Holywood quería reflejar la confusión de actitudes culturales durante y después de la segunda guerra mundial y contraponerla a los valores tradicionales sociales, políticos y económicos norteamericanos.
De igual manera el Cine Negro tiene algunas características del llamado Cine Expresionista alemán que se distinguía por la deformación de la realidad, dando una visión subjetiva del ser humano en el que predominaban sus sentimientos más que la descripción objetiva de la realidad. Este cine expresionista alemán estuvo influido por una gran cantidad de directores alemanes que emigraron a Estados Unidos, como Fritz Lang, Ernest Lubistch, Billy Wilder, etc.
Pero fue en la década de los 40 cuando el Cine Negro toma carta de naturaleza específica, aunque la diferencia entre Cine de gansters y Cine policial sea, a veces, muy sutil.
El consenso dice que la característica fundamental que tiene este género cinematográfico es el de tener un fuerte contenido expresivo y característica estilización visual. Otras características son la narración fragmentaria, la legalidad y la moral no coinciden, los diálogos son secos, cínicos y cortantes, los finales trágicos, las historias complejas, y en las historias predomina la amoralidad, el relativismo y el escepticismo ético.
El Cine Negro plantea siempre dualidades: luces/sombras, objetividad/subjetividad, culpabilidad/inocencia, pobreza/riqueza en los que los temas suelen ser: el amor trágico, el mal, la pobreza, la exclusión social, el racismo y la muerte.
Todo ello dentro de una iluminación tenebrosa, en localizaciones urbanas durante la noche, bruma, humo, uso de sombras para poner de relieve la psicología de los personajes y con la introducción de un personaje, la Femme Fatale, seductora del héroe y cuya lealtad se contrapone a los motivos por los que actúa el protagonista, actuando como manipuladora de este.
Sobre cuál es la primera película que se puede considerar de Cine negro hay mucha controversia, aunque algunos estudiosos se decantan por El Halcón Maltés (1941) de John Huston con Humphrey Bogart como protagonista, mientras que otros consideran como la primera a El desconocido del tercer piso (1940) de Boris Ingster.
Por razones de programación, no hubo proyección en el mes de diciembre, por lo que el año concluyó únicamente con la proyección de 8 películas.

2016. Año quinto. El año del cambio.

Este año 2016 va a ser el del inicio de una serie de novedades en la programación y funcionamiento del Cine Club.
Por un lado, no solo se programan películas de Cine Clásico, con la revisión de la obra de directores con Billy Wilder, Otto Preminger, Joseph Mankiewicz, Jaques Tourneur, Robert Soidmack aunque ya no son mayoritarias en la programación, sino que se introducen películas de los años 90 y la primera década del 2000, con directores como Costa-Gavras, Fernando Meirelles, David Cronenberg, Wong Car-Wai y Claude Sautet.
También, por primera vez se exhibe un documental relacionado con el medioambiente, más bien con su deterioro, introduciendo un tema de actualidad y de reflexión que no había sido debatido, hasta ese momento, en el Cine Club. Para su presentación y coordinación se invita a una Organización no Gubernamental (ONG), Amigos de la Tierra, organización ecologista que fomentan el respeto al medio ambiente dentro de una sociedad más justa y solidaria.
Por otro lado, a partir de la programación llevada a cabo después del verano, se introduce otra novedad muy importante y es que se duplican las sesiones mensuales.
Este hecho se produce, fundamentalmente por la consolidación del número de asistentes al Cine Club y el deseo de todos de tener una mayor programación, así como por la continuidad del Equipo de Gobierno municipal, que renovó su mandato en las elecciones municipales celebradas en la primavera del 2015 y que ve con buenos ojos, la promoción de las actividades culturales en el Municipio.
Y aunque de una manera tímida, Jesús introduce un hecho que va a darle al Cine Club, un aire más participativo y colectivo. Se trata de que las presentaciones corran a cargo de personas distintas de Jesús Yagüe y así en este ejercicio, Jesús prueba este formato, que como se verá se consolidará en los próximos ejercicios. Así Leire Lopez, José Miguel Puerta y Rafa López-Chapí, son las tres primeras personas distintas de Jesús Yagüe en presentar las sesiones del Cine Club y coordinar la participación en el coloquio. Estas películas presentadas por otras personas distintas de Jesús, las denomina Películas para el Diálogo, por entender que tenían un contenido más dirigido al debate. Las películas que Jesús se asignaba para su presentación las denominó,
De mis favoritas, que además de su significado explícito, él quería darles a los debates un contenido más cinematográfico y centrarlo en valores cinematográficos más que en otro tipo de consideraciones.

2017. Año sexto. La introducción de cine europeo.

En este año también se introducen novedades en el Cine Club. Hasta este momento el cine producido y rodado e Estados Unidos, era el cine predominante en las proyecciones. Más del 85% de las películas proyectadas hasta ese año, habían tenido su origen en ese país.
Una gran cantidad de las mismas, eran de Cine Clásico ya que, en la primera época del cine sonoro, en los años 30 y 40 del siglo pasado, se concentraron una gran cantidad de directores que, por su talento, han sido la fuente de la que han bebido las generaciones posteriores. Por lo tanto, era de obligado cumplimiento que un Cine Club, además dirigido por un Director de Cine, rindiera tributo a esa época dorada del cine.
Pero aprovechando la circunstancia de que el Cine Club está consolidado y se ofrece la posibilidad de poder programar dos sesiones cada mes, Jesús Yagüe comienza a programar una serie de películas producidas en otros países, como España, Italia, Reino Unido, Francia, Dinamarca además de Estados Unidos.
De igual modo, ya no se concentra en programar únicamente Cine Clásico, aunque sigue ofreciéndonos algunas pinceladas maravillosas de los años 50 y 60 del siglo XX, sino que introduce una serie de películas producidas en el siglo XXI, acompañadas de otras de las últimas décadas del siglo pasado. También programa otro documental, como el año anterior, que, aunque está catalogado como de Ciencia Ficción, nos hace reflexionar sobre el trato que la humanidad está dando al planeta en el que vive.
El género predominante, casi exclusivo es el del Drama, en sus distintas vertientes, que, con sus guiones y argumentos, dan pie para poder debatir sobre comportamientos y actitudes de los seres humanos.
Algunas de las películas que se programaron, tuvieron gran éxito de público cuando fueron estrenadas, por lo que también se introdujeron temáticas que fueron susceptibles de agradar a un público mayoritario.
Directores como Berlanga o Isabel Coixet, españoles, Luchino Visconti, Ettore Scola, Valerio Zurlini y Gillo Pontecorvo, italianos, Claude Sautet, Jean Renoir o FrancoisTruffaut, franceses, Florian Henkel, Aleman, Gabriel Axel, danés, además de los Peter Bogdanovich, Guillermo del Toro, Roberto Rossellini y otros, llenaron de diversidad lingüística, generacional y temática este año 2017.
Se continúa con los dos tipos de temáticas, implantadas el año anterior, De mis Favoritas y Películas para el diálogo, que se van intercalando en el tiempo y Jesús selecciona los presentadores para estas últimas.
La selección de los presentadores era absolutamente decisión personal de Jesús, iba acompañada de un par de reuniones, con tiempo suficiente de antelación, en las que se le proveía al presentador de material para que confeccionara la presentación y una semana antes de la misma, volvían a reunirse para supervisar el trabajo realizado por el presentador.
Estas sesiones nos hacen ver el cariño que Jesús tenía al Cine Club, las lecciones de cine y de la vida que transmitía en todas las reuniones con los presentadores y su concepto sobre el compromiso con los demás y el perfeccionismo con el que enfrentaba cada situación de la vida.

2018. Año séptimo. El salto hacia delante.

El 2018 se puede decir que es el año de la consolidación definitiva del Cine Club.
Las sesiones tienen una asistencia bastante numerosa, en algunas de ellas se sobrepasan las 40 personas y se empieza a formar un núcleo de personas asistentes que comienzan a ser habituales a la gran mayoría de las sesiones.
Este hecho, produce algún tipo de inquietud en Jesús, acostumbrado a manejarse en ámbitos más reducidos y en los que él pensaba podría desarrollarse mejor el coloquio y donde la participación podía ser más dinámica y abierta.
Afortunadamente, la experiencia nos demostró que los coloquios eran dinámicos, que nadie se quedaba sin participar y que, probablemente, el tiempo del mismo, se quedaba corto (había que terminar a las 10 de la noche, hora de cierre de la Casa de la Cultura).
La programación que Jesús preparó para este año abarcó películas que cubrían todas las décadas desde 1930 hasta la primera del siglo XXI. También, aunque inexorablemente había una mayoría de películas de Estados Unidos, ya se hicieron frecuentes las películas de países como Francia, Italia, Alemania y Reino Unido y fue programando otras de países como la URSS.
Así, se programaron películas de directores tales como Woody Allen, Nikita Mijailkov, Warren Beatty, Francesco Rossi, Elia Kazan, Lucino Visconti, Sam Mendes, Thomas Mcarthy, entre otros, además de los ya programados, John Ford, Max Ophuls, Orson Welles, Howard Hawks. En cuanto al género, casi exclusivamente se centró en el Drama con todas sus acepciones, político, romántico, familiar y algunas películas de neorrealismo.
Dado que seguían programándose Películas para el Diálogo y De mis favoritas, el elenco de presentadores se fue ampliando y estos, independientemente de las sugerencias que Jesús les hacía sobre el contenido de las presentaciones, comenzaban a introducir material propio y a hacer unas presentaciones más profundas, tanto del contenido cinematográfico, como del entorno social, político y económico en el que se gestaron las películas que presentaban. Así, se fue notando, a medida que las sesiones iban avanzando
en el tiempo, que los intervinientes en los coloquios aumentaban y ofrecían comentarios que denotaban conocimiento y destilaban pedagogía, probablemente por el interesante número de docentes que atienden habitualmente las sesiones del Cine Club.

2019. Año octavo. La globalización de la programación

Aunque desde 2017, Jesús Yagüe comienza con un cambio en la tendencia sobre el origen de las películas que se programan, siendo el origen de las mismas más diverso y donde el peso de Estados Unidos no es tan determinante, en 2019 de las 20 películas programadas, únicamente 3 tienen su origen en ese país.
El resto, se han producido en 8 países diferentes, desde Macedonia, Japón, Polonia, Canadá, y Grecia hasta los ya programados en más ocasiones en el Cine Club como Reino Unido, Francia, Italia, además de Estados Unidos.
Esto representa una mayor apertura al conocimiento del cine realizado en otros países del que, durante muchos años, no había habido posibilidad de acceder fácilmente dada la presencia inmensamente mayoritaria del cine americano que acaparaba casi todos los medios de distribución y sobre todo la gran mayoría de las salas comerciales.
Así, tuvimos la oportunidad de adentrarnos en la obra de directores tales como Milcho Manchevski, Hiro¡kazu Koreeda, Agnes Varda, Jean Pierre Melville, Oliviere Asaayas, Roman Polanski, Jean Claude Lauzon, Stephen Daldry, Francis Ford Coppola, que no habían sido programados con anterioridad en el Cine Club, además de profundizar en la obra de directores con Louis Malle, Claude Sautet, Costa-Gavras, John Houston, Bernardo Bertolucci, Max Ophuls o David Cronenberg de los que ya habíamos tenido la oportunidad de ver alguna de sus obras en años anteriores.
Se continuó incorporando nuevos presentadores para las Películas para el Diálogo y Jesús siguió manteniendo las películas De mis favoritas. Los coloquios continuaron siendo muy participativos y en casi todos ellos había que terminar antes de que los participantes hubieran agotado las intervenciones que querían hacer.

2020. Año noveno. El año de la pandemia.

Cuando comenzó el año, nadie pensaba que nuestros comportamientos y nuestra forma de vida iban a verse alterados de la forma tan drástica como lo fueron a partir del mes de marzo.
El año comenzó con normalidad hasta la quinta sesión que se celebró de manera presencial el 6 de marzo con la película Lady Bird Lady Bird de Ken Loach. La siguiente sesión programada para el 20 de marzo, fue suspendida ya que el día 15 se decretó el confinamiento de toda la población y se suspendieron todas las actividades presenciales de todo tipo. Fue como si un gran cataclismo hubiera tenido lugar y hubiera dejado la faz de la tierra sin habitantes. La sensación fue de desconcierto y cierto temor ante los efectos de
un virus, hasta ese momento desconocido y que estaba llevándose muchas vidas sin tener un remedio para atajar sus consecuencias.
El Cine Club, por supuesto, canceló sus actividades presenciales, pero de manera inmediata una serie de personas adictas al Cine Club, se pusieron en marcha para que por medio de la técnica, las sesiones pudieran realizarse virtuales y utilizando determinadas aplicaciones, las personas interesadas, se pudieran descargar las películas, verlas en sus domicilios y mediante otra aplicación, conectarse los días previstos para tener las sesiones de Cine Club presencial, y mantener un coloquio sobre la película programada.
Jesús Yagüe dio carta blanca a estas personas para que así lo hicieran y el 2 de abril, únicamente 17 días después de decretado el confinamiento, el Cine Club mantuvo su primer coloquio dirigido por Jesús, de manera virtual, cada uno de los participantes en sus domicilios, sobre la película de Raoul Ruiz, La Comedia de la Inocencia.
A partir de ese día y dadas las ganas de ver cine y de mantener diálogos sobre cine, se programaron sesiones virtuales todas las semanas durante los meses siguientes hasta el mes de mayo inclusive.
La asistencia media a estas sesiones virtuales fue de 20 personas, todo un éxito, dada la tipología de asistentes al Cine Club y los medios requeridos para poder participar en las mismas.
Una de las características que tuvo este año 2020 fue que la gran mayoría de las películas que se programaron eran posteriores a 1990 con algunas que habían sido producidas después de 2010.
Los países en los que se produjeron esas películas fueron 15, desde Senegal, Kazajistan, Israel, Cuba, Corea del Sur, Finlandia, Suecia hasta los más habituales en el Cine Club de Francia, Italia, Reino Unido, Alemania y Estados Unidos.
Esto también refleja un cambio paulatino en la consideración de que el cine de calidad no solo proviene de Estados Unidos, sino que también se produce cine de calidad en otros países del mundo que merece la pena ser conocido y reconocido.

2021. Año décimo. El año en que todo comenzó a ser diferente.

El comienzo del nuevo año, se presentaba esperanzador ya que, después, de casi dos años de pandemia, que, aunque en España y el resto de países europeos las restricciones comenzaron en el mes de marzo de 2019, en China, país origen de la misma, dieron los primeros avisos a la Organización Mundial de la Salud, a finales del 2018 y comenzaron las restricciones de movilidad y de vida social a comienzos del 2019 en la ciudad de Wuhan, una ciudad para casi todos en Occidente desconocida pero que con sus 11 millones de habitantes, es la ciudad más poblada de la zona central de la República Popular China, en la confluencia de los ríos Yangtsé y Han. Cuenta en este año con más de 350 institutos de investigación, más de 1650 empresas de alta tecnología y con 230 empresas en la lista de Fortune Global 500, los indicadores sanitarios comenzaban a disminuir y todo parecía indicar una pronta vuelta a la normalidad, cosa que finalmente no se produjo y las restricciones de movilidad y vida social continuaron hasta la publicación de estas líneas.
El Cine Club Jesús Yagüe, continuó con su programación quincenal pero que, dadas las ganas de coloquio y cine que tenía un grupo de más de 20 incondicionales, se extendieron a otros dos semanales que empezamos a denominar Sesiones de Amigos del Cine Club Jesús Yagüe.
Así, Jesús Yagüe siguió con su programación habitual de Películas para el Diálogo, presentadas por los habituales del Cine Club y De mis Favoritas presentadas por Jesús Yagüe.
De esta manera, nuestros incondicionales seleccionaron películas de Adolfo Aristarain, Joel Cohen, Carl Teodor Dreyer o Bob Fose.
Pero, desgraciadamente, el año ya no empezó bien. Nuestro Fundador, empezó a sentir molestias en las articulaciones que, en principio, los médicos no dieron importancia y que después de multitud de pruebas durante los tres primeros meses del año y de intensificarse las molestias, hasta límites poco tolerables, devinieron en un problema sin solución que el 31 de marzo desembocó en la pérdida física de Jesús Yagüe. Este hecho, por su rapidez, nos dejó a todos sus amigos y Adictos al Cine Club Jesús Yagüe consternados, ya que albergábamos la esperanza de un restablecimiento de sus dolencias y seguir recibiendo sus sabios y atinados comentarios durante los coloquios de las sesiones del Cine Club.
Pero, casi de manera inmediata, aquellos en los que había confiado Jesús, quizás de manera premonitoria solamente un año antes, para ayudarle en la labor del Cine Club, decidimos que el legado que Jesús nos había dejado, teníamos que seguir manteniéndolo, en honor y recuerdo de su memoria. Así, decidimos constituirnos en un Asociación Cultural a la que denominamos Cine Club Jesús Yagüe, con el fin de continuar con la labor del Cine Club que, en este año, cumple su décimo aniversario.
Va a ser una tarea difícil, porque sustituir a personas como Jesús no es posible, pero gracias a la ayuda de todos los Adictos y de nuevos amigos que van teniendo noticias de la existencia de este Cine Club Jesús Yagüe, las sesiones van siendo cada vez más numerosas y la participación en los coloquios más activa e interesante.
Esperamos seguir con esta actividad muchos años más con la esperanza de convertir este punto de encuentro en un referente para la visión conjunta de películas y debatir sobre los temas sociales, políticos, económicos, históricos, de comportamiento, de actitudes, religiosos, morales, etc. que afortunadamente el cine nos presenta para que de su reflexión saquemos conclusiones que nos ayuden en nuestra vida.